El consejo de Luqmán a su hijo (parte 1 de 2): Soluciones para los padres del siglo XXI
Descripción: El consejo de Luqmán a su hijo es imperecedero, y comenzaremos a analizarlo punto por punto.
- Por Aisha Stacey (© 2016 IslamReligion.com)
- Publicado 05 Sep 2016
- Última modificación 03 Mar 2019
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Educar a los niños en el siglo XXI no es más fácil, ni más difícil, que haberlos criado en cualquier otro siglo. Por supuesto, cada época tiene sus problemas particulares, pero un buen consejo general siempre ofrecerá buenas soluciones, porque la naturaleza humana se mantiene sin cambios. Cuando Dios hizo descender el Corán, lo llenó de consejos y recordatorios que serían igualmente útiles para todas las épocas.
El consejo de Luqmán a su hijo se encuentra en el Corán en el capítulo llamado con su nombre: sura 31, aleyas 12 a 19. Además de esto, Ibn Kazir, el reconocido erudito e historiador islámico del siglo XIV e. c., escribió sobre Luqmán en su libro Historias del Corán. Él utilizó información extractada de las fuentes más confiables de la época. Según Ibn Kazir y la mayoría de los eruditos islámicos, Luqmán no fue un Profeta sino un sabio al que Dios bendijo con sabiduría. De acuerdo con Ibn Kazir, los primeros eruditos eran de la opinión de que la sabiduría implica tener criterio y entendimiento religioso. En algunas tradiciones se dice que el propio Luqmán afirmó que mantenía sus cualidades nobles y honorables "bajando mi mirada, cuidando mi lengua, comiendo lo que es lícito, manteniendo mi castidad, manteniendo mis promesas, cumpliendo mis compromisos, siendo hospitalario con los invitados, respetando a mis vecinos y dejando de lado lo que no me concierne. Todo esto me hizo la persona que estás viendo"[1].
El sabio conocido como Luqmán le dio 10 consejos a su hijo. Consejos que son aplicables hoy día y que pueden ser seguidos y utilizados por cualquier padre que quiera criar a un hijo a la luz del Islam. Se dice que si todos los padres implementaran el consejo de Luqmán, no habría necesidad de preocuparse por el destino de los niños en el Más Allá, pues ya se les habría mostrado el camino que lleva al Paraíso. En las pocas aleyas coránicas que contienen el consejo de Luqmán a su hijo, está la clave del éxito en esta vida y en el Día del Juicio.
El consejo que un padre decide dar o no a sus hijos es muy importante. Sería devastador escuchar a los propios hijos decir en el Día del Juicio: "Pero mi mamá (o papá) no me dijo eso". Elegir las palabras correctas puede ser una tarea difícil, por lo que tomar el consejo de los profetas o de nuestros predecesores virtuosos, como Luqmán, es una idea excelente. Así que examinemos qué le dijo Luqmán a su hijo, teniendo en cuenta que decidió hablar de manera respetuosa. El respeto es importante entre la gente que participa de una conversación, pero es aún más importante entre los miembros de la familia. A nadie le gusta ser sermoneado o gritado, especialmente con formas de hablar inaceptables proviniendo de un miembro amado de la familia.
1."¡Oh, hijito! No dediques actos de adoración a otro fuera de Dios, pues la idolatría es una gran injusticia". (Corán 31:13)
Luqmán llama a su hijo "hijito" en lugar de llamarlo por su nombre, para enfatizar la unión familiar. Llama su atención animándolo a escuchar con atención lo que está a punto de decir. Luego, llama la atención de su hijo a lo que es más importante a los ojos de Dios. Aquel que asocia a otros con Dios, le dice, comete la falta o injusticia más grande hacia el Creador y Sustentador del universo. Esa persona también se hace un grave daño a sí misma, porque se expone a la posibilidad de merecer la ira de Dios y del castigo eterno.
"Dios no perdona la idolatría, pero fuera de ello perdona a quien Le place. Quien asocie algo a Dios comete un pecado gravísimo". (Corán 4:48)
2. "Le he ordenado al ser humano hacer el bien a sus padres…". (Corán 31:14)
En el Corán, Dios menciona los derechos de los padres en la misma frase que el aspecto más importante del Islam: la adoración solo a Dios. Esto indica que ser bondadosos con los padres, honrarlos y respetarlos, es en extremo importante en la forma de vida que es el Islam.
"Tu Señor ha ordenado que no adoren sino a Él y que honren a sus padres…". (Corán 17:23)
El Profeta Muhammad reforzó el deber de ser bondadoso con los padres. Un compañero del Profeta le preguntó una vez cuál de las muchas buenas obras que un hombre puede hacer es la más amada por Dios. El Profeta Muhammad le respondió: "Ofrecer la oración en su debido tiempo". El compañero le preguntó entonces: "¿Y cuál es la siguiente?". El Profeta le respondió: "Ser bueno con los padres y obedecerlos"[2].
En la siguiente parte de sura Luqmán, aleya 14, Dios aclara las dificultades que las madres en particular enfrentan al criar a los hijos, y exige que los hijos agradezcan a sus padres. Dios nos recuerda luego que es a Él a Quien volveremos, así que nuestra primera lealtad es con Dios únicamente, seguida por la devoción y bondad para con nuestros padres.
3."Le he ordenado al ser humano hacer el bien a sus padres. Su madre lo lleva [en el vientre] soportando molestia tras molestia, y su destete es a los dos años. Sean agradecidos conmigo y con sus padres, pero sepan que ante Mí comparecerán al final". (Corán 31:14)
"¡Oh, hijito! Sabe que, aunque una mala acción fuera del peso de un grano de mostaza, y estuviera escondida bajo una roca o en [algún otro lugar de] los cielos o de la Tierra, Dios la sacará a la luz…". (Corán 31:16)
Luqmán aconseja luego a su hijo recordar que la fuerza y el poder Le pertenecen solo a Dios. El conocimiento de Dios es perfecto, todo lo que sucede o sucederá en este mundo ya lo conoce Dios. La fuerza de Dios es absoluta y no debe ser cuestionada, desafiada ni ignorada por nadie.
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