Los Testigos de Jehová (JW) son una denominación cristiana con muchas creencias que se diferencian de la corriente principal del cristianismo. Son conocidos por su enérgica evangelización, su preocupación por el final de los tiempos, y su traducción única de la Biblia, denominada Traducción del Nuevo Mundo de las Sagradas Escrituras. En esta conclusión de nuestro estudio de la poco entendida religión conocida como Testigos de Jehová, daremos una mirada a algunas creencias que parecen ser iguales a las del Islam.

Los Testigos de Jehová creen que Jesús no es Dios. Esa es una afirmación que enfurece a la mayoría de los cristianos, y que ha llevado a muchos a declarar que los Testigos de Jehová son una religión pseudocristiana. Los musulmanes, como sabemos, afirmamos categóricamente que Jesús no es Dios; por lo tanto, al leer esta pequeña declaración, un musulmán podría pensar: "¡Oh, son como nosotros!". Pero, ¿es así? Profundicemos un poco más en su creencia sobre el papel de Jesús.

Los Testigos condenan a la Trinidad como idolatría pagana y, en consecuencia, niegan la divinidad de Jesús. Sin embargo, ellos creen que Jesús es el unigénito de Dios, que es inferior a Dios. Aquí termina abruptamente la similitud con el Islam. Dios dice en uno de los mayores versículos del Corán que Él no ha engendrado.

"Di: ‘Él es Al-lah, Uno. Al-lah es el Absoluto. No engendró ni fue engendrado. Y no hay nada ni nadie que sea semejante a Él’". (Corán 112)

Adicional a esta concepción errónea básica de la naturaleza de Dios, los Testigos también creen en otras afirmaciones que son extravagantes para los musulmanes. Ellos afirman que la vida de Jesús, o lo que denominan su sacrificio, se convirtió en el precio de "rescate" para redimir a la humanidad del pecado y la muerte. Dios, dicen, lo creó todo en el Cielo y la Tierra a través de Cristo, el "obrero maestro", siervo de Dios[1]. En su propia literatura, los Testigos se refieren a Jesús como "Su primera creación espiritual, el artesano maestro, el Jesús prehumano"[2]. También afirman que, después de la resurrección de Jesús por parte de Dios, él fue "exaltado" a un nivel más alto que el de los ángeles. La refutación a esto se encuentra en las propias palabras de Dios en el Corán.

"Originador de los cielos y de la Tierra. ¿Cómo podría tener un hijo si no tiene compañera y Él es Quien ha creado todo? Él tiene conocimiento de todas las cosas. ¡Ese es Dios, su Señor! No hay más divinidad que Él, Creador de todas las cosas. Adórenlo solo a Él. Él es el Protector de todas las cosas". (Corán 6:101-102)

La idea de que Jesús era el rescate para salvar nuestras almas o perdonar nuestros pecados, es un concepto completamente opuesto a la creencia islámica.

"¡Oh, Gente del Libro! No se extralimiten en las creencias de su religión. No digan acerca de Dios sino la verdad: porque el Mesías, Jesús hijo de María, es un Mensajero de Dios y Su palabra [¡Sé!] que depositó en María; un espíritu creado por Él. Crean en [la unicidad de] Dios y en Sus Mensajeros. No digan que [Dios] es una parte de la trinidad, abandonen esa idea, es lo mejor para ustedes. Dios es una única divinidad. Lejos está, Glorificado sea, de tener un hijo. A Él pertenece cuanto hay en los cielos y en la Tierra. Dios es suficiente como protector". (Corán 4:171)

La creencia de que el pecado original causó que los seres humanos heredaran la muerte y el pecado, está también lejos de las enseñanzas del Islam. El Islam nos enseña que todos los seres humanos nacen sin pecado y están inclinados de forma natural a adorar solo a Dios (sin intermediarios). Para mantener este estado de impecabilidad, la humanidad tiene que seguir los mandamientos de Dios y esforzarse por llevar una vida recta. Si alguien cae en pecado, todo lo que se requiere es el arrepentimiento sincero. Cuando una persona se arrepiente, Dios borra su pecado como si nunca lo hubiera cometido.

Los Testigos de Jehová enseñan que ningún alma permanece después de la muerte, y que Jesús regresará a resucitar a los muertos, restaurando su cuerpo y alma. Los que sean juzgados como rectos, recibirán la vida eterna en la Tierra (que se convertirá en un paraíso). Los que sean juzgados injustos, no serán atormentados, sino que morirán y dejarán de existir. ¿Qué dice el Islam al respecto?

Según el Islam, la vida continúa en la tumba después de que el cuerpo es enterrado. El alma de una persona creyente es removida con facilidad del cuerpo, vestida con una túnica celestial dulcemente perfumada, y llevada a través de los siete cielos. El alma es finalmente regresada a la tumba, y una puerta del Paraíso es abierta para esa persona, que podrá oler su fragancia cuando la brisa sople hacia ella. Se le albriciará el Paraíso y esperará con ansia que comience la Hora. El alma del incrédulo, por otra parte, es removida del cuerpo con mucho esfuerzo y problema, pero finalmente regresará al cuerpo. La persona es atormentada en la tumba hasta que comience la Hora.

"Ese día se pesarán las obras con la verdad. Aquellos cuyas [buenas] obras pesen más [en la balanza] serán los bienaventurados. Pero aquellos cuyas [buenas] obras sean las livianas serán los perdedores, porque fueron injustos con Mis signos". (Corán 7:8-9)

Hay que reconocer que los Testigos de Jehová evitan conductas que desagradan a Dios, como la celebración de cumpleaños y de festividades provenientes de religiones falsas. Los Testigos de Jehová no celebran sus cumpleaños porque consideran esto una glorificación del individuo en lugar del Creador. Estas afirmaciones, sin duda, resuenan con la creencia Islámica. Sin embargo, debido a que el concepto básico de Unicidad de Dios en los Testigos está viciado, su comportamiento moral y sus valores significan muy poco. Dios nos dice claramente acerca de quiénes serán los mayores perdedores en el Día del Juicio.

"Diles: ‘¿Quieren que les haga saber quiénes son los que no obtendrán beneficio alguno por sus obras?". [Son] aquellos que desperdiciaron los esfuerzos que realizaron en este mundo mientras creían obrar el bien. Son quienes no creen en los signos de su Señor ni que comparecerán ante Él. Sus obras habrán sido en vano y en el Día de la Resurrección no tendrán nada que pese en la balanza". (Corán 18: 103-105)

Así, nos encontramos con que, si bien a primera vista los Testigos de Jehová parecen tener un sistema de creencias acorde con las creencias islámicas, esto está lejos de la verdad. Un análisis cuidadoso revela defectos y errores en sus teorías básicas. Parece que los Testigos de Jehová tienen muy poco en común tanto con el Islam como con el cristianismo. Sus teorías acerca del Cielo y el Infierno, la Unidad y Unicidad de Dios, la Trinidad y la creación del universo, no son aceptables para los musulmanes, y parece que tampoco son aceptables para la mayoría de las denominaciones cristianas.