Sura 10, Yunus (Jonás) (parte 2 de 2)
- Por Aisha Stacey (© 2017 IslamReligion.com)
- Publicado 04 Sep 2017
- Última modificación 04 Sep 2017
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Se llama la atención sobre la ignorancia y el desvío, y sus consecuencias. Se advierte a la gente que no se comporte como la gente del pasado, cuyas civilizaciones fueron destruidas.
Aleyas 57 a 60: La guía ha llegado
La instrucción de Dios ha sido dada a la humanidad, es una misericordia, una cura y una guía. Díles, Profeta Muhammad, que esas cosas son una bendición y son mejores para la humanidad que todas las riquezas de este mundo que traten de acumular. Pídeles que piensen acerca de las provisiones que han sido dadas por Dios. Él ha hecho lícitas algunas e ilícitas otras, ¿por qué entonces la gentre cambia las normas y tratan de hacer permisible lo ilícito? ¿Acaso Dios les dio permiso de hacer esto o están inventando mentiras sobre Dios? ¿Cómo será manejado esto en el Día del Juicio? Piénsenlo. Dios, de hecho, está lleno de gracia hacia la humanidad, pero la mayoría de la gente es ingrata.
Aleyas 61 a 67: Dios es testigo de todo
Todo lo que es importante para la gente está relacionado, desde leer el Corán hasta lo mundano, Dios es testigo de todo ello; y todo, tanto lo grande como lo minúsculo, está registrado en un libro. Ni siquiera una partícula, ni el peso del polvo, escapa al conocimiento de Dios, y todo se mantiene en un registro claro. Para aquellos que creen en Dios y Le temen no habrá miedo, ellos recibirán buenas nuevas tanto en este mundo como en el Más Allá. Dios le dice al Profeta Muhammad que no permita que las palabras de los incrédulos lo entristezcan. Dios es Omnipotente, Omnioyente y Omnisciente. Todo en los cielos y en la Tierra Le pertenece solo a Él. Aquellos que invocan a otros en lugar de Dios están siguiendo solo suposiciones y mentiras. Dios hace el día y la noche, y esto es una señal para quienes escuchan el mensaje.
Aleyas 68 a 70: La consecuencia de mentir acerca de Dios
Algunas personas dicen que Dios tiene un hijo. Él está libre de toda necesidad, es el Amo de los cielos y de la Tierra. Ellos no tienen autoridad de afirmar tal cosa, ¿por qué inventan mentiras sobre Dios? Aquellos que mienten acerca de Dios no tendrán éxito (real), solo tendrán un breve disfrute en este mundo, pero en el Más Allá enfrentarán un castigo severo.
Aleyas 71 a 86: Historias del pasado
Cuéntale a la gente la historia de Noé. Él le dijo a su pueblo: "Si mi presencia entre ustedes les recuerda demasiado lo que no quieren oír acerca de las señales y advertencias de Dios, entonces hagan lo que quieran, pero que sea claro y decisivo. Recuerden, sin embargo, que no les he pedido ningún tipo de retribución, mi recompensa está solo en Dios. Soy de aquellos a quienes se les ordenó adorarlo solo a Él". Ellos no escucharon, y rechazaron a Noé. Dios lo salvó y a aquellos que estaban con él en la nave. Aquellos que negaron las señales fueron ahogados.
Luego, Dios envió a otros, cada uno a su propio pueblo. Ellos vinieron con evidencias claras, pero las generaciones subsecuentes persistieron en la incredulidad. Moisés y Aarón fueron enviados al Faraón y su pueblo, pero estos se comportaron con arrogancia hacia ellos y hacia su mensaje. Moisés dijo: "¿Crees que te traigo magia?, porque los magos jamás tienen éxito". El Faraón impío llamó a todos los magos en la tierra y Moisés expuso la inutilidad de su magia. Dios no promueve el trabajo de los que se portan irresponsablemente.
Nadie le creyó a Moisés, excepto algunos jóvenes de su propio pueblo; la mayoría de la gente temía demasiado al régimen del Faraón. Moisés les pidió a los creyentes que confiaran en Dios y le oraran a Él pidiéndole que los liberara de las tierras de la gente injusta.
Aleyas 87 a 95: Liberación
Dios le reveló a Moisés y a Aarón que debían sacar a su pueblo de Egipto, y que debían construir sus casas y establecer la oración. Entonces, Moisés pidió que la riqueza y el esplendor del pueblo del Faraón les fueran arrebatados. "Arrasa su riqueza y endurece sus corazones", pidió. Dios dijo que esta súplica sería respondida y le dijo a Moisés que se mantuviera firme. Así que Moisés llevó a su pueblo a través del mar; el Faraón y sus soldados los persiguieron, pero fueron ahogados.
En el último instante, el Faraón dijo que creía en el Dios de Moisés y que se sometía a Él, pero Dios respondió: "¿Ahora?". Dios salvó su cuerpo, pero no su vida, para que fuera una señal para quienes venían después de él. Mucha gente todavía no escucha las señales. El pueblo de Moisés fue establecido en un buen lugar y se les proveyó con lo que requerían para una buena vida. Ellos no difirieron entre sí hasta que les llegó el conocimiento, pero en el Día del Juicio Dios juzgará entre las cosas en las que no pudieron llegar a un acuerdo. El Profeta Muhammad tenía certeza total en lo que le fue revelado. Incluso si la Gente del Libro no presta atención a su llamada, aún encontrará evidencia de su profecía en sus propios libros.
Aleyas 96 a 103: La conversión forzada está prohibida
Hay muchos a quienes el amor por este mundo les ha sellado sus corazones y sus ojos. No pueden ver las señales frente a sus rostros. Ellos no creerán. A diferencia de otras ciudades que vieron el castigo de Dios, el pueblo de Jonás sí se benefició de sus advertencias y creyeron. Ellos creyeron que el castigo les había sido retirado y tuvieron disfrute por un tiempo. Si Dios hubiera querido, todo pueblo en la Tierra habría creído. Se le pregunta al Profeta Muhammad que si obligaría a la gente en contra de su voluntad. La creencia solo llega por la voluntad de Dios y Él deshonra a aquellos que no usan su sentido común. Dile a la gente que vea las señales en los cielos y en la Tierra, pero ninguna señal convencerá a los que no han de creer. Dios pregunta: "¿Qué están esperando?". Al final, Dios salvará a los mensajeros y a los creyentes, ese es el camino de Dios y Él dice que es justo que Él salve solo a los que creen.
Aleyas 104 a 109: La guía ha llegado, así que elige
Dios le ordena al Profeta Muhammad decir: "Gentes, duden de mi religión si quieren, jamás adoraré a quienes adoran fuera de Dios; pero adoraré a Dios, Quien causará vuestra muerte, y se me ha ordenado ser creyente". También se le ordena dedicarse a la religión y no ser de los que asocian a otros con Dios. Dios dice que no le reces a otros porque ellos no pueden beneficiarte ni perjudicarte, y si lo haces serás con seguridad de los perdedores. Si Dios te aflige con una calamidad, nadie podrá quitártela sino solo Él, y si Él te otorga un favor, nadie podrá retener Su generosidad. Él la otorga a quien Él quiera, y Él es indulgente, misericordioso.
También se le dice al Profeta Muhammad que le diga a la gente que ha llegado la verdad. Quien elija seguir el camino correcto lo hace para su propio beneficio, y quien se aleja de él lo hace por su propio riesgo. Yo (Muhammad) no estoy sobre ti para obligarte a seguir la guía. Dios le dice al Profeta Muhammad que siga lo que le ha sido revelado y que sea paciente hasta que Dios juzgue. Él es el mejor de los jueces.
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